martes, 10 de agosto de 2010

Yo Canto A La Diferencia Violeta Parra ( a propósito del bicentenario)


Yo canto a la chillaneja si tengo que decir algo,
Y no tomo la guitarra, por conseguir un aplauso,
Yo canto a la diferencia que hay de lo cierto a lo falso,
De lo contrario no canto.

Les voy hablar en seguida de un caso muy alarmante,
Atención el auditorio, que va a tragarse el purgante,
Ahora que celebramos el dieciocho más galante,
La bandera es un calmante.

Yo paso el mes de septiembre con el corazón crecido,
De pena y de sentimiento, de ver mi pueblo afligido
El pueblo amando la patria y tan mal correspondido,
El emblema por testigo.

En comando importante, juramento a la bandera,
Sus palabras me repican, de tricolor las cadenas,
Con alguaciles armados en plazas y alamedas,
Y al frente de las iglesias.

Los ángeles de la guarda vinieron de otro planeta
Porque su mirada turbia su sangre de mala fiesta
Profanos suenan tambores, clarines y bayonetas
Dolorosa la retreta.

Afirmo señor ministro, que se murió la verdad,
Hoy día se jura el falso, por puro gusto no más,
Engañan al inocente, sin ni una necesidad,
Y arriba la libertad.

Ahí pasa el señor vicario con su palabra bendita.
¿podría, su santidad, oírme una palabrita?
Los niños andan con hambre, les dan una medallita,
O bien una banderita.

Por eso su señoría, dice el sabio salomón,
Hay descontento en el cielo, en chuquí y concepción,
Ya no florece el copihue y no canta el picaflor,
Centenario de dolor.

Un caballero pudiente agudo como un puñal
Me mira con la mirada de un poderoso volcán
Y con relámpagos de oro desliza su cadillac.
Cueca de oro y libertad!

De arriba alumbra la luna, con tan amarga verdad,
La vivienda de la luisa, que espera maternidad,
Sus gritos llegan al cielo, nadie la habrá de escuchar,
En la fiesta nacional.

La luisa no tiene casa, ni una vela, ni un pañal,
El niño nació en las manos, de la que cantando está,
Por un reguero de sangre, mañana irá el cadillac,
Cueca amarga nacional.

La fecha más resaltante, la bandera va a flamear,
La luísa no tiene casa, la parada militar,
Y se va a parque la luísa, adonde va a regresar
Cueca triste nacional.

Yo soy a la chillaneja, senõres para cantar,
Si yo levanto mí grito, no es tan sólo por gritar,
Perdónenme el auditorio si ofender mi claridad.
Cueca larga militar.