Ten cuidado niño que se desprenden de las cascaras de
naranja puestas sobre la estufa, imágenes hopperianas, silencio, pausas,
alguien baila break abrazado a un tango, dos poetas travestis cuelgan de un
hilo sobre los semáforos, hacen el show, necesitan dinero para sus
electroshopper, malabarean poemas, que envuelven en harina dentro de un globo.
Canta una silla en espera, T E E E S I E N T A S , una muchacha abre su
pelo como una flor que esparce mantequilla sobre un pan sin destruirlo, le digo:
soy torpe al verte
Y la voz muta a un acordeón
punk un contrabajo metal
recorro una ciudad purpura
conmovido por un frio
que permite dejar el aliento sobre los vidrios
que anuncian un mensaje:
equivoquémonos
partámonos el lomo
Para parir el rojo población y descolgar los sepias árboles
del bullerio.