domingo, 7 de noviembre de 2010

Encajes del Silencio

Árboles nobles con ramas extensas
acarician mis espacios
de libertades ajadas.
Sus hojas al caer tallan cicatrices
hechizando el encaje de mi silencio.

Nuestras vidas ausentes
resistieron vientos de olvido.
Infinitas praderas nacieron
con manantiales de amargura
donde estaciones del tiempo
sigilosas peregrinan.

Entonces sacaste tus manos de mi corazón
y tan lejos de mí no eras ya, mi triste soledad.
Y ahí, renació el grito del encanto
anunciando al pájaro de los buenos tiempos
que reverdeció mis senderos delirantes
acicalándolos de visiones abiertas al sol de la vida
con un aroma a perdón, melancólico y bello.

3 comentarios:

  1. Eso fue precioso...

    Ese lenguaje lo comprendí sin problemas...
    Aquel amanecer...
    me desvelo cada día esperando que despunte el alba...
    Que de mi pasen aquellas manos....
    y vuelva a reverdecer mi sendero...

    Saludos, muy lindas palabras, llenas de esperanza y recompensa...

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  2. Reverdeció el olvido y solo queda un perdón melancólico y bello, un hermoso poema, felicitaciones Rhodia
    un afectuoso abrazo
    saludos

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  3. Juegue,
    tirese
    sin problemas
    señorita
    Aplauden las manos
    le hacen reverencia
    que venga que nadie
    la detenga
    la erupción
    de tu luna
    en la estación
    de tu esencia

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