No me prives de este fuego
no me vacíes la mirada,
déjame creer que será mejor
este mundo que habitamos,
que la indiferencia no me habite
quiero elegir la inocencia primaria,
esa que desata tempestades
la que se nutre de la duda
la que se embarca en utopías
la que incendia el corazón
la que crea espacios abiertos
la de las manos generosas
la que regala sonrisas
la que ama al prójimo
la que libera de las culpas
la que acerca a la humildad
la que te corona de estrellas
la que descubre al mago sabio
y te introduce en los misterios.
Lléname de espantos y furias
ante las injusticias e injurias
dame un corazón generoso
alegre, fuerte y afectuoso.
No quiero un rostro sombrío
ni sentir mi espíritu vacío.
no me vacíes la mirada,
déjame creer que será mejor
este mundo que habitamos,
que la indiferencia no me habite
quiero elegir la inocencia primaria,
esa que desata tempestades
la que se nutre de la duda
la que se embarca en utopías
la que incendia el corazón
la que crea espacios abiertos
la de las manos generosas
la que regala sonrisas
la que ama al prójimo
la que libera de las culpas
la que acerca a la humildad
la que te corona de estrellas
la que descubre al mago sabio
y te introduce en los misterios.
Lléname de espantos y furias
ante las injusticias e injurias
dame un corazón generoso
alegre, fuerte y afectuoso.
No quiero un rostro sombrío
ni sentir mi espíritu vacío.
Realmente emotivo. Un angustioso grito de esperanza.
ResponderEliminarFuerte, bueno. Arrolla el interior y sacude la desidia.
Muy bello, bastante emotivo, un grito desesperado lleno de esa esperanza que todos debemos tener, jamás se debe tener el espiritu vacio.
ResponderEliminarCARIÑOS..
Agradezco tu presencia en nuestro espacio Preste Juan y tu emotivo comentario.
ResponderEliminarun abrazo fraterno
saludos
Querida Ingrid, gracias por estar siempre presente con tus amables comentarios
ResponderEliminarun abrazo para ti
cariños
Aqui el hombre sale de su piel
ResponderEliminarse viste de humano, grita de amor
viene desde el magma pujando
incendiado de viaje abriendo camino
desde el primer alma tiene escrito
lo que no se escribe aunque lluevan
sus dedos y se reforeste el mundo
de nuevas selvas,
nuevos desiertos,
nuevos lenguajes.
Renato
Gracias Renato por tu presencia, tremenda contribución, echaba de menos tu verso.
ResponderEliminarun abrazo fraternal
saludos